Los tomates secos, al ser deshidratados, concentran los nutrientes y sabores del tomate fresco, ofreciendo una alternativa nutritiva y versátil. Son ricos en antioxidantes, vitamina C, vitamina A, licopeno, potasio y calcio, lo que los convierte en un aliado para la salud cardiovascular, la visión, el sistema inmunológico y la prevención de la retención de líquidos.
Propiedades y Beneficios:
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Antioxidantes:
El licopeno y la vitamina C presentes en los tomates secos ayudan a combatir los radicales libres y proteger las células del daño.
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Salud Cardiovascular:
El potasio ayuda a regular la presión arterial y reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.
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Salud Ósea:
El calcio contribuye a la salud de los huesos y dientes.
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Visión:
La vitamina A ayuda a prevenir la degeneración macular y otras enfermedades oculares.
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Sistema Inmunológico:
La vitamina C refuerza el sistema inmunológico y protege contra infecciones.
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Prevención de la retención de líquidos:
El potasio y el calcio ayudan a eliminar el exceso de líquido en el cuerpo.
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Fuente de energía:
Son una fuente concentrada de energía, ideal para incluir en una dieta equilibrada.
Los tomates secos pueden ser rehidratados y utilizados en diversas preparaciones, como salsas, guisos, pastas, ensaladas, pinchos y aperitivos. También se pueden añadir secos a sopas, paellas y otros platos.